Los niños, niñas y adolescentes deben sentirse seguros de que se les protege y se les dota de todo lo necesario para su bienestar.
Suelen ser los que reciben directa e indirectamente los errores y faltas de los adultos que les rodean o que tienen poder de decisión sobre ellos y ellas.
La Convención sobre los Derechos del Niño aprobada el 20 de noviembre de 1989 los derechos que debe tener todo niño y niña hasta que cumpla 18 años, incluyendo el derecho a la supervivencia, a la educación, a la salud y a no ser discriminados por razón de sexo, raza, religión, distinción física ni cualquier otro motivo.
Tanto niños y niñas como adultos deben conocer estos derechos, para aprender a respetarlos y compartirlos con todas aquellas personas que no los conocen.
La igualdad y el respeto deben ser la base por la que trabajar para aumentar el bienestar de la vida de cualquier niño o niña. Deben ser en las primeras personas en las que tenemos que pensar para que las decisiones que tenemos que tomar en el día a día no les afecten negativamente.
Éste es nuestro parecer y buscamos concienciar en este sentido para que los niños y niñas se sientan en una sociedad igualitaria, respetuosa y solidaria.